El Gallito pide intervención de rey Salomón

El “quincenario mensual” de
Arequipa se preocupa por
demora del Jurado Electoral

 

Publica hipotético acuerdo
en que candidatos renuncian

 

Un hipotético acuerdo entre los candidatos presidenciales que “deciden dejar de joder”, así con todas sus letras, aparece en la primera página de El Gallito 573, el “quincenario mensual” de Arequipa, que se difundió ayer en versiones impresa y de internet.

Preocupación por el Perú... (¿?)

Según su director, autor, fotógrafo, editor y hasta “chulillo de sí mismo”, Álvaro Javier “Lessness” Podestá Cuadros, se trata de una edición extraordinaria porque contiene la confesión -también en primera página- de que “El Gallito no se vende por mermelada…” y en párrafo aparte admite que “por chicharrones sí”.

Además, en su portada, informa que “Convocan al rey Salomón para que dirima en pleito electoral de Keiko y Castillo”.

Vamos mejorando en fútbol

En su página 2, El Gallito habla de fútbol y señala que “de a pocos nos vamos sacando la saladera”, al informar que Perú goleó a Colombia -1 y “aunque se tuvo que ajustar bastante, quedó casi listo para clasificar”. ¡Gran consuelo!

Como ya nos hemos habituado, proseguimos con la descripción de este El Gallito 573 que viene a todo color en su edición impresa y publica en su página 3 donde hace un llamado: “Acéptalo, Kenyi, ya fue ya”… No se sabe qué quiso decir, pero uno se imagina al ver la foto de un Kenji con cara de angustia.

Cara de Kenji plantea gran incógnita

 

En esa misma página, el hebdomadario que ya ha echado raíces en Arequipa, informa que “jugadores de la tinka que no ganaron exigen repetir el sorteo”.

Y llegamos a la página 4 y última del “quincenario mensual” que cierra con informaciones electorales y denuncia que “Siguen represalias contra miembros de la ONPE” y que “Se populariza uso de caretas entre los que votaron ‘mal’ para que no los buleen al salir a la calle”.

Uno se ve obligado a preguntar qué fue votar mal o bien, ¿no?

No dejan tranquila a la ONPE

Llegamos felizmente al final de la descripción de este nuevo ejemplar, que usted puede recoger en determinados locales de la Ciudad Blanca que se atreven a hacerlo o, si prefiere, descolgarlo de internet, porque como su director no se cansa de repetir: “El Gallito no se vende porque no tiene precio”.

Hasta la próxima, lector amigo.

(Imágenes captura de El Gallito en internet)

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