Sus cenizas reposan en
una urna en la Universidad
donde pasó sus últimos días
La UNSA comunicó
su deceso a la
comunidad
arequipeña hace una semana
A “Scooby”, llamado en vida “el perro de las protestas” porque participaba en todas las demostraciones que programaban los universitarios y los descontentos de Arequipa, le rindieron un homenaje póstumo, con la cremación de sus restos y la colocación de sus cenizas en una urna que se guardará para siempre en el área de Ingenierías de la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA).
El 30 de enero pasado, la UNSA informó a la comunidad de Arequipa, a través
de su página oficial de Facebook que Scooby dejó de existir en el campus que se
convirtió en su hogar y donde años atrás fue acogido.
“La comunidad agustina realiza coordinaciones para que sus restos permanezcan en un lugar especial de la universidad”, concluyó el comunicado, algo que se hizo realidad con la cremación de los restos y la conservación de las cenizas en un lugar especial del campus.
Los universitarios que lo conocieron recuerdan que Scooby era un can sin dueño, al que Sonia Choque, trabajadora administrativa de la UNSA, recogió cuando estaba muy enfermo.
Sonia Choque cuida las cenizas de ScoobySonia cuenta que había dos versiones sobre el origen de Scooby. Una dice que su anterior amo había sido un mendigo y la segunda, que formaba parte de una familia de norteamericanos que lo dejaron en la universidad, informó Gisela Vilca en una información que publicó el diario Correo el 27 de diciembre de 2015.
Lo cierto es que Sonia Choque hizo un llamado a través de las redes y consiguió algunas erogaciones para completar la suma de 1 500 soles que se requerían para que Scooby fuera sometido a la intervención quirúrgica que le salvó la vida.
Vilca escribió que Scooby “no es un actor, pero es famoso en Arequipa” y que “es conocido como el perrito de las protestas, porque donde hay una manifestación siempre está presente”.
También era hincha del
club Melgar y como tal “estuvo –no podía faltar– en las celebraciones del club
Melgar logró el Campeonato del Descentralizado de Fútbol”.
Como perro de las protestas e hincha del Melgar, Scooby participó en los encuentros del club como consuetudinario asistente a sus partidos.
Los aficionados recuerdan que en un incidente callejero, en abril de 2017, fue acuchillado a su salida del estadio de la UNSA, poco después del encuentro que el Melgar disputó con Deportivo Independiente de Medellín.
Los hinchas y
quienes participaron en alguna protesta recuerdan con cariño a Scooby, quien al
escuchar los gritos de las demostraciones y los bombos que las acompañaban,
salía a juntarse con los ciudadanos.
Fue un personaje y Arequipa lo recordará y, será posible que en el futuro, alguien le lleve flores, al lugar de la universidad donde sus restos reposarán para la eternidad, detrás de un mármol conmemorativo.
(Imágenes de El Pueblo, Corrreo, la República y archivo del autor)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario