sábado, 3 de octubre de 2020

No quiero bono… quiero lo que me deben

Reclamo por una deuda

que no es honrada

 

Nota del editor – El autor de este reclamo trabajó durante nueve años primero como jefe de prensa de la Oficina de Control de la Magistratura (OCMA) del Poder Judicial (PJ) y luego en Prensa e Imagen de la Corte Suprema. Fue autor del proyecto para la fundación del Museo de la Justicia, por lo cual recibió felicitaciones de sus superiores. Luego de varios años, y cuando ya él se hubo retirado de la institución el Museo de la Justicia fue cerrado a causa de la inconducta de un funcionario encargado de su debido mantenimiento. Tanto en la OCMA como en Prensa e Imagen, en su calidad de Consultor de imagen y Prensa, creó y editó boletines informativos y revistas en apoyo a la imagen institucional. Se retiró en 2010 y cuando no fue atendida su solicitud de pago de beneficios sociales y otros, entabló una demanda al Poder Judicial en reclamo de sus derechos laborales. Cinco años después la Segunda Sala de Derecho Constitucional de la Corte Suprema resolvió a favor del extrabajador demandante la casación planteada por el procurador del Poder Judicial.

 

Por Luis Eduardo Podestá

 

He resistido como peruano a la tentación de la queja y el reclamo. Pero al pasar más de un año sin que el honorable Poder Judicial (PJ), a través del también honorable Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), honre la deuda que tiene con este modesto ciudadano y otros miles, he decidido poner el grito en el cielo… a ver si me escuchan.


              El autor ofrece conferencia en Seminario para Periodistas

No soy el único. Hay por lo menos un par de miles extrabajadores del PJ que le ganaron limpiamente en juicios llevados por las divisiones inferiores de ese Poder y hasta en casación ante la Sala Constitucional de la Suprema Corte, su derecho a que les paguen beneficios sociales, vacaciones truncas y otros saldos que contemplan las leyes de este martirizado Perú donde vivimos.

Que yo sepa, es el PJ, a cuyo servicio estuve nueve años de mi vida, la única institución que no honra sus deudas con los extrabajadores y la única también que fracciona la deuda como les viene en gana a sus altos funcionarios.

Y para recordarlo mejor, hubo veces en que el honorable PJ pagó su deuda como sus funcionarios querían, amortizándola en modestísimas cuotas de mil o poco más de soles mensuales y solo en contadas ocasiones, que uno bendijo por extraordinarias, superó esa cantidad, tan raras que no alcanzan a contarse con los dedos de una mano.


                                No honra la ley con sus extrabajadores

Es decir, la deuda con los extrabajadores comunes y corrientes, gente de a pie, les dicen los opinólogos, les es amortizada en cómodas cuotas judiciales, lo que significaría, llegado el caso -si llega- que las víctimas de esta medida, deben vivir -deben vivir- hasta el 2032 para ver la deuda pagada… si es posible verla desde el fondo de una tumba.

Que yo sepa, empresas e instituciones privadas que se respetan, pagan en una sola armada que la llaman, los beneficios que les ganan sus trabajadores despedidos, jubilados o renunciantes. En una sola armada, es decir, el extrabajador recibe su plata junta, contante y sonante, se olvida de la deuda y lo olvidan a él.

Sin embargo, hay que señalarlo porque es de justicia, altos magistrados que lograron primero su destitución porque a Fujimori no le gustaban y luego de años reclamaron sus derechos y fueron reincorporados, recibieron calentitos más de dos millones de soles, como quien dice, de un solo pepinazo, del mismo PJ que nos adeuda beneficios sociales, vacaciones truncas y otras pequeñeces a por lo menos un par de miles de extrabajadores.


                         Monumental sede del Palacio Nacional de la Justicia

Alguna vez que amenaza borrarse de mi memoria, un alto funcionario del PJ ante quien tuve el atrevimiento de solicitar información sobre la forma en que sería honrada la deuda que me tiene, me dijo sin sonrisa y sin mueca de burla: “Debe tener en cuenta, señor Podestá, que hay algunos extrabajadores que han dejado en herencia su deuda y la están cobrando sus descendientes”.

Yo quiero disfrutar de lo que me adeuda el PJ, señor gerente. Si algo queda, eso será la herencia para mis descendientes. Y recordarle que según la ley, el empleador debe pagar en el término de 48 horas, los beneficios sociales que correspondan a su extrabajador.

Por lo demás, es el mismo PJ que demora hasta las calendas griegas el pago a sus extrabajadores, el que obliga y sentencia a empleadores el pago de esos beneficios, cuando se trata de los demás y les aplica le ley, incluyendo intereses.


                        Se exige cumplir la ley a los demás

Adicionalmente, el referido funcionario tuvo la amabilidad de explicarme, el PJ hace un presupuesto de la deuda que tiene con sus extrabajadores, lo presenta ante el MEF, la ministra María Antonieta Alva lo ve y decide si da vuelta a la página o le presta atención.

Y lo que reclamamos, por ser de justicia, es que el PJ presente el referido presupuesto oportuna y debidamente sustentado y que la ministra no lo trate como algo que puede esperar hasta pasado mañana, sino como algo impostergable, porque tiene ese carácter para miles de extrabajadores que merecen otro trato y no la indiferencia del Estado para el que trabajaron.

Es necesario mencionar, que el autor de este reclamo no ha recibido ningún bono universal ni selectivo distribuido generosamente por el gobierno a determinados sectores de la población.

En consecuencia, señores PJ y MEF: Paguen esa deuda total y luego olvídense.

 

(Imágenes de archivo del autor)

www.podestaprensa.com

1 comentario:

Daniel Cumpa León dijo...

No puede haber reforma del Poder Judicial que valga si no empieza por honrar las deudas con sus extrabajadores. Más todavía si estos derechos han tenido que ser defendidos en los propios tribunales frente a la intentona de burlarlos. ¿Qué clase de ironía jurídica es esta que ni el propio y autónomo Poder Judicial puede cumplir con las sentencias que emanan de sus propios fueros? Mi total respaldo Luis Eduardo, querido y respetado colega y amigo.