Sentimiento sin fronteras
a las madres del mundo
Un abrazo sin fronteras a todas las madres del mundo, de
los cercanos que sufren la diaria agonía de las guerras y en los problemas de
la paz por la suerte de sus hijos.
Para todas ellas el homenaje de hoy |
Para aquellas que, en cualquier lugar, sienten tu lejanía
y esperan una carta.
Para las que esperan hoy un abrazo que será su mejor regalo.
Para las que se fueron a otro país para conseguirte el pan
que te falta en el tuyo.
Para las que asumen la doble función de madre y padre ante
la ausencia de este.
Pero principalmente, para las madres de mi patria, que
luchan contra todo lo que se les presenta, incluidos el hambre, la falta de
vivienda, la frustración de no darte lo que te falta.
Para ellas que desoyen el paso de los años y te sienten
como el niño que se les fue hace muchos años en busca de un destino.
Para aquellas que buscan pan, casa y alivio para sus niños
en cualquier trabajo.
Para aquellas, también, que lo tuvieron todo y lo
perdieron todo cuando te fuiste de este mundo o cuando una desgracia se
abalanzó sobre ella.
Para aquellas que lo tienen todo, esposo, hijos, nietos,
casa, comodidades y no sufren por carencia alguna.
Jóvenes mamás con obligaciones grandes |
Para las madres adolescentes que fueron víctimas de abuso,
que se enfrentan a la incomprensión de un sector vilmente cavernario de la
sociedad.
Para todas ellas, que están en el mundo entero y en mi patria,
mi abrazo allá donde se encuentren.
Mamá Delia (primera a la derecha) con hijos y nietos |
Para todas ellas mi abrazo inmenso no solo por su Día de
la Madre sino todos por los días de la eternidad para que todos, hombres,
mujeres, niños, niñas, jóvenes, sientan que cada día es un Día de la Madre, alejado del mercantilismo con que lo han desteñido hoy, quienes encuentran en fechas como esta un motivo de lucro.
Mercedes nos dejó temprano |
Y para mi madre Mercedes Leonor, quien me dejó muy joven y
no alcanzó a tener el bienestar que yo hubiera podido darle en pobre
compensación de lo que ella nos dio a mis hermanos y a mí durante su corta pero esforzada vida, mi recuerdo tenaz y
mi cariño sin tiempo ni medida, con la esperanza de que ello atenuará su
ausencia.
Luis Eduardo Podestá Núñez
No hay comentarios.:
Publicar un comentario