El
deshielo del calor
global
descubrió una
montaña
de maravilla
Nota
del editor – En el Perú, donde no acaban los descubrimientos, el calentamiento
global ha puesto a la vista una montaña de extraordinarios colores que los
pobladores del Cusco no han tardado en denominar Winikunka, la montaña del arcoíris,
porque de lejos se observa su belleza creada por la naturaleza en un trabajo de
millones de años. La agencia estatal de noticias Andina ofrece la noticia y
adjunta una invitación a los eventuales visitantes, quienes, afirma, deben tomar
precauciones porque se trata de un paseo que puede llegar hasta los 5,000
metros sobre el nivel del mar, lo cual exige buen corazón, pulmones limpios y –para
los extraños– una previa adaptación al medio.
Cómo llegar a Winikunka, la montaña Arcoiris
Por Andina
Descubierta
al mundo debido al deshielo de su suelo a consecuencia del calentamiento
global, la montaña de siete colores, conocida también por su nombre en quechua,
Winikunka, se ubica como un nuevo destino turístico que nos ofrece Cusco.
Cusco premiado con otra maravilla |
Winikunka
es una innovadora opción para el turista que puede contemplar este atractivo
turístico natural ubicado a más de 5,000 metros sobre el nivel del mar (msnm)
luego de realizar una moderada caminata que recorre paisajes de belleza única.
Situada
en la cordillera de Vilcanota, a poca distancia del majestuoso nevado
Ausangate, la quinta montaña más alta en Perú situada a 6,372 msnm, la montaña
de siete colores presenta curiosas pigmentaciones rojizas, pardas, verdes y
amarillentas, generadas por la erosión de la tierra durante millones de años,
dejando estos estratos minerales tan coloridos.
Se
requiere tener un plan para tal aventura, una condición física apta y muchas
ganas de conocer los distintos paisajes que ofrece este camino de los andes
peruanos.
La ruta a la Montaña Arco Iris
El visitante
empieza el viaje de un día de duración en
un bus de la ciudad de Cusco muy temprano, por lo general de madrugada.
El trayecto también es espectacular |
El camino
lo lleva por las localidades de Andahuaylillas, Quiquijana y Checacupe, hasta
llegar a Pitumarca, en la provincia de Canchis, un pueblo pintoresco del sur
cusqueño, donde comenzará el viaje a pie.
En
Cusco, cerca del coliseo Cerrado, en Huayruropata dos empresas ofrecen el
servicio Sicuani-Checacupe. El pasaje puede costar 5 soles. Su destino es
Pitumarca.
Una vez
en Pitumarca se inicia el largo ascenso de aproximadamente tres horas hacia la
Montaña de los Siete colores.
Para ingresar,
los lugareños cobran cinco soles si uno es peruano, y 10 si es extranjero, con
el fin de solventar algunos gastos de servicios básicos que ellos mismos han
organizado ante el creciente turismo en la zona.
El que lo desee puede ir a caballo |
Los
visitantes tendrán también la opción de realizar otras actividades, como montar
caballos, que son ofrecidos por si no se desea caminar un largo tiempo.
Hay tramos
donde los caballos no pueden ingresar, por lo que la única forma de seguir es
caminar.
En el
trayecto, uno estará rodeado de impresionantes escenarios que muestran glaciares y numerosas lagunas.
Podremos
encontrar pastores con llamas, alpacas, ovejas, y distinguiremos que la fauna
permite avistar eventualmente a zorros, zorrinos, huallatas, perdices, venados,
vizcachas, cóndores y osqollos o gatos salvajes.
Una vez
arriba, el espectador podrá encontrar un mirador, y observar la totalidad del
espectacular panorama, donde destaca parte del imponente nevado Ausangate.
Los habitantes ofrecen servicios al visitante |
En la
cima corre un viento fuerte y el clima es frío. Como parte del paisaje, casi
siempre pueden divisar vicuñas, que merodean cautelosas por la puna.
Luego
de permanecer en la cúspide de la pendiente, se procede a regresar por el mismo
camino al valle de Pitumarca, recorrido que resulta más sencillo que el
anterior.
Las
personas podrán reponerse con el almuerzo y el descaso. El paseo finaliza con el viaje de retorno hasta la Ciudad Imperial,
adonde se llega aproximadamente al comenzar la noche.
Consejos
Ante
semejante esfuerzo, es preferible poseer una condición física aclimatada a la
exigente altura que presentan dichos escenarios cusqueños. Dos días en la zona parecen
suficientes para adaptarse.
La montaña Arcoiris está cerca del Cusco |
Fuera
de esto, se debe contar con cierta experiencia escalando o caminando grandes
distancias, puesto que la subida es empinada y resulta difícil para nuevos
escaladores.
No es
usual ver a niños realizando dicho viaje, debido a que pueden presentar
problemas al caminar.
Se
aconseja que el viajero cuente con equipos de aventura sin cargar las mochilas
con excesivo peso, ya que caminar en altura con ese cargamento solamente
dificultará el trayecto.
Además,
se recomiendan botas de trekking con buen agarre, bastones para caminar, ropa
abrigadora, bloqueador solar, gorras, guantes, lentes de sol, medicinas,
snacks, bebidas rehidratantes y ponchos, más ahora ante la presente temporada
de lluvias que prolongará su duración hasta marzo.
(Imágenes
de Peruska Chambi Echegaray publicadas por Andina)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario