Pueden entrar hasta
dos
personas y librarse
de los
efectos de un
terremoto
El ingeniero mexicano Reynaldo Vela Coreño, presentó el denominado Proyecto K-109, consistente en una
cápsula en forma de huevo gigante, capaz de alojar dos personas durante y después de un terremoto
destructivo, pues estará equipada con agua, alimentos y oxígeno para vivir un mes, informaron medios mexicanos. tras la conferencia que ofreció el inventor para presentar su creación.
Cápsula antisísmica mexicana |
Vela Coreño, egresado
de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), quien ganó el Premio de
Ingeniería de la Ciudad de México 2009, dijo que su proyecto surgió cuando
estudiaba en Japón y Corea del Sur cursos sobre biocombustible y analizó la
resistencia de las estructuras japonesas de las cuales, a pesar de ser ligeras
y “sismorresistentes”, se desprenden muros y objetos colgantes que pueden
convertirse en proyectiles contra los ocupantes.
Durante la reunión con la prensa, el profesional remarcó que “esto nos va a permitir rescatar
a la persona en cuanto localicemos la cápsula a través del GPS que viene
integrado, así como las luces led, además de que cuenta con oxígeno hasta por
30 días, agua y alimentos”.
El el diario La Vanguardia de México informó que en la fabricación de
los prototipos de la cápsula se emplearon materiales de especial dureza,
capaces de resistir los derrumbes causados por el colapso de edificios y, sobre
todo, están provistos de sistemas de comunicación con el exterior y permiten
conocer el grado de intensidad del movimiento sísmico que se produce.
La cápsula también
tendrá una conexión con los sistemas de alerta sísmica del país y su
propia alerta de respaldo, que se activan en cuanto empieza el fenómeno.
Destructivo terremoto de México hace 30 años |
El inventor del singular refugio aconsejó: “Si tienes una cápsula en la casa y de pronto se activa, en
lugar de buscar el famoso triángulo de la vida, te introduces en la cápsula y
una vez adentro te vas a dar cuenta, gracias al software que instalaremos, de
la magnitud del temblor, el tiempo y la duración”.
La persona que se
refugie en la K-107, tendrá alimento para un mes, “como por ejemplo amaranto y
comida utilizada por astronautas de la NASA, un sistema de agua de consumo
humano y un tanque de oxígeno, entre otras cosas”, dijo Vela.
Añadió que la cápsula
cuenta con un sistema de localización GPS con el respaldo de una red de 18
satélites lo cual permitirá su fácil localización en caso de que las comunicaciones
colapsen a causa de la violencia del sismo.
El costo del prototipo de la cápsula K-109 se ha estimado en unos 22 mil pesos mexicanos (alrededor de 1200 dólares)
La presentación de la
cápsula tuvo lugar en la víspera de la fecha en que se conmemoró el trigésimo aniversario
del terremoto del 19 de setiembre que causó 12 mil muertos y daños
incalculables en Ciudad de México.
(Con información e
imagen difundidas por La Vanguardia de México)
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