Astrónomos lo vieron entrar detrás
del disco pero no lo vieron salir
Los telescopios estaban enfocados hacia el Ison,
llamado el “cometa del siglo”, por la espectacularidad de su aparición y por la
expectativa de que su encuentro con el Sol iba a ofrecer un magnífico
espectáculo cósmico, pero a lo que los astrónomos pueden resignarse ahora es a
que solo la cola puede haber sobrevivido.
Viaje directo al horno solar (Captura de video de BBC Mundo) |
"Como Ícaro, voló muy cerca del sol.
Continuaremos aprendiendo", dijo la NASA, la agencia aeroespacial norteamericana, en un mensaje a través de un tuit
pero como ocurrió con el mitológico personaje también se le habrían derretido
sus alas de cera.
El Ison, 15 veces más brillante que la Luna de unos dos
kilómetros de diámetro se habría desintegrado frente a la cara opuesta del Sol,
hacia donde se dirigió el jueves, día anunciado como el de su mayor
acercamiento al astro.
Otros factores de la desaparición del Ison habrían
sido el ciclo de tormentas solares que lanzaba gigantescas llamaradas al
espacio y su poderosa atracción gravitacional frente a un cuerpo de las dimensiones
proporcionalmente insignificantes del cometa.
Confían en que la cola sobreviva |
Los astrónomos esperaban una sobrevivencia del cometa,
uno de los más brillantes del siglo y estimaban que su brillo en el espacio
duraría hasta mediados de diciembre en una versión temprana de la estrella de
Belén, visible desde el hemisferio norte.
Sin embargo, algunos expertos, como Matthew Knight,del Observatorio Lowell de Arizona, Estados Unidos, confían en que “algo” del Ison,
debe haber sobrevivido a la gravedad solar y a los 2.000 grados centígrados de
temperatura que desafió.
Knight, quien ha observado al cometa durante el último
año, ha diseñado tres posibilidades, según difundió la BBC Mundo, sobre la
suerte del Ison:
Esquema de un viaje con final (BBC Mundo) |
l Se ha desintegrado como él cometa Lovejoy en 2011 que dio la vuelta al
Sol cuya gravedad lo dividió. Al abandonar el área de atracción de la corona
solar, el Lovejoy estalló.
l Ha sufrido la suerte del cometa Encke, “también conocido como
Matusalén por su avanzada edad cometaria (105 años), que ha orbitado alrededor
del Sol unas 70 veces desde que fuera observado por primera vez en el siglo
XVIII. Este cometa ya no tiene cola, y ha perdido rápidamente su masa y se está
apagando”. Los científicos creen que para 2050-2060 dejará de ser cometa para
convertirse en un simple asteroide, dijo la BBC. Knight cree que el Ison podía sufrir el mismo destino.
l La tercera alternativa es que el Ison haya sobrevivido como lo
esperaba el mundo entero y podría haber corrido la suerte del Ikeya Seki en
1965, que “atravesó la corona solar, el calor incendió los gases en su núcleo
profundo y unos días después emergió de la capa externa del Sol con una inmensa
cola detrás. Millones de personas observaron maravilladas el gran espectáculo”.
Un espectáculo similar esperaban del Ison no solo los
científicos sino millones de habitantes de la Tierra pero según los indicios
existentes a la fecha, el Sol no permitió al intruso en sus inmediaciones y lo quemó.
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