El Vaticano retira medalla
conmemorativa del primer
año por error tipográfico
El Papa Francisco se quedó sin medalla conmemorativa,
debido a que la artista que diseñó el sello se equivocó y puso “L” en lugar de “J”
en el nombre de Jesús. El Vaticano no tardó en retirar toda la emisión cuando
ya habían se habían vendido unos pocos juegos.
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| No es mismo la "L" que la "J" |
Cuando la BBC Mundo informó sobre el asunto, calificó el error
“de proporciones bíblicas”, mientras otros medios informativos señalaban el
error ortográfico e incidían en que quienes hubieran podido alcanzar algún juego
de la medalla con error, tendrían en sus manos una fortuna de enorme valor para
coleccionistas.
Había comenzado ya a la venta la medalla oficial del
primer año de pontificado del papa Francisco, acuñada por el Instituto
Poligráfico y la Casa de la Moneda del estado italiano. Con un diámetro de
44mm, se había previsto su reproducción en oro, plata y bronce.
La oficina de prensa del Vaticano informó que sólo cuatro
de los cuatrocientos juegos producidos por la Casa de la Moneda del EstadoItaliano habían sido vendidos, informó la BBC y señaló que el error fue obra de
la artista Mariangela Crisciotti, quien diseñó la medalla.
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| No tiene medalla de su primer año |
En la cara frontal de la medalla aparece el rostro del
Papa Francisco con la frase ““Franciscus Pont. Max. AN. AN. I” y en el anverso
una escena inspirada en un pasaje bíblico
En el reverso estaba una frase que marcó profundamente al
joven Jorge Mario Bergoglio cuando tenía 17 años y sintió la llamada de Dios: “Vidit
ergoi Jesus publicanum et quia miserando arque eligendo vidit, ait ille sequere
me”, que se traduce como “Vio Jesús a un publicano y como le miró con
sentimientos de amor lo eligió y le dijo: sígueme”.
Rodeando este canto estaba la frase: “E CIVITATE
VATICANA” y el número de la medalla. Cada una de ellas esta acompaña
normalmente de un certificado de garantía y sellado por la Secretaría de Estado
y la Casa de la Moneda.
El Vaticano informó que de los 400 estuches que se ordenó
acuñar, cuatro ya han sido vendidos mientras que los demás fueron prontamente
retirados.
Cada vez que se elige un nuevo Papa se crean nuevas
medallas todas ellas numeradas y cuya venta es una fuente de ingresos para el
Vaticano.
Coleccionistas de todo el mundo se interesan en la
adquisición de los estuches que al pasar el tiempo se convierten en valiosas
piezas de colección.
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