Partidarios usan el
asunto y reclaman
el indulto inmediato
Una baja de presión que sufrió el exdictador Alberto Fujimori, en la prisión donde cumple una condena de 25 años por delitos de lesa humanidad y corrupción, es utilizada por sus partidarios para reclamar un “indulto humanitario” alegando que su vida se encuentra en peligro.
Procurador Julio Arbizu puso las cosas enn su sitio
El procurador anticorrupción, Julio Arbizu, salió inmediatamente al frente de los reclamos y señaló que el exdictador había tenido atención inmediata de un médico privado y que lo ocurrido fue solo “un episodio eventual de decaimiento”.
Cuando ocurrió la descompensación, Fujimori fue atendido de inmediato por su médico de cabecera y correligionario, el legislador Alejandro Aguinaga, en su centro de reclusión de la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía Nacional (Diroes), informó la agencia Andina.
El procurador Arbiizu comentó el suceso y afirmó que “la inmediata atención médica a Alberto Fujimori demuestra que el exmandatario cuenta con todas las garantías debidas para ser atendido en su centro de reclusión”.
Cuenta con comodidades que ningún preso tiene
“Parece ser un episodio eventual de recaída, pero sí hay que señalar que esto da cuenta que el señor Fujimori puede acceder a los servicios de salud, a un servicio de salud privado, en el momento que pueda tener esta dolencia”, declaró el procurador a Andina.
Tanto el congresista Héctor Becerril Rodríguez, como el también congresista hijo del exdictador, Kenji Fujimori, salieron de inmediato a declarar ante los medios televisivos que el presidente Ollanta Humala, estaba demorando con el indulto que se le ha solicitado para favorecer al reo.
Afirmó: "No tengo cáncer terminal"
El pedido de indulto formulado por los cuatro hijos del exdictador se halla en manos de una comisión que estudia los pedidos de conmutación de penas y que debe presentar su informa ante el presidente Humala en cuanto haya evaluado el verdadero estado de salud del reo.
Los hijos han alegado que su padre padece un cáncer terminal, lo que fue negado por el mismo Fujimori, al salir de una serie de exámenes a que fue sometido el año pasado en el especializado Instituto de Enfermedades Neoplásicas (INEN).
Luis Eduardo Podestá
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