Alberto Jordán se
reincorpore a la policía
Como no hay mal que dure cien años, Poder Judicial hizo justicia con el reclamo del general de la Policía Nacional del Perú, Alberto Jordán, injustamente destituido por el gobierno de Alan García y ordenó que se reincorpore a su institución.
"Yo vengo luchando cuatro años en esta situación por reincorporarme a mi institución por una situación que fue injusta. Yo evité una situación de derramamiento de sangre, yo dialogué y mientras dialogaba me traicionaron", declaró esta mañana el general Jordán a una televisora local.
El general Jordán fue separado de la institución porque se negó a cumplir una orden de su comando que hubiera implicado un grave enfrentamiento con pobladores de Moquegua que bloquearon el puente Montalvo, sobre la carretera Panamericana Sur, llave principal de la comunicación con Tacna y el vecino Chile, el 16 de junio de 2008.
El Frente de Defensa de los Intereses de Moquegua encabezado por el profesor Zenón Cueva desarrollaba un paro desde el 4 de junio de ese año, en reclamo de una mayor cantidad de dinero proveniente del canón que la minera Southern Perú pagaba a las regiones de Moquegua y Tacna.
En Moquegua pensaron que “los hacían cholitos”, es decir, los engañaban, porque la suma de dinero que le tocaba era muy inferior a la que se destinaba a su vecina Tacna.
Como las autoridades no pudieron resolver el reclamo, los pobladores decidieron bloquear el puente Montalvo.
El Gobierno de García Pérez, luego de contemplar la situación con su gabinete, dispuso que su entonces ministro del Interior, Luis Alva Castro, ordenara desbloquear el puente a como diera lugar.
Mal armada y en número que era superado infinitamente por unos 25 mil exaltados moqueguanos, el contingente policial fue rebasado. Algunos policías fueron heridos, tomados en rehenes y recluidos en una iglesia de Moquegua.
Entonces, a pesar de la disposición de reprimir el desorden, el general Jordán inició un diálogo con los dirigentes de la protesta y pudo llegar a un final sin graves consecuencias.
El general fue acusado de desobediencia y destituido. Desde entonces inició una batalla judicial que acaba de ganar cuando la Quinta Sala de la Corte Superior de Justicia de Lima dispuso su reincorporación a la institución a que pertenece.
"El quinto juzgado me notifica que mi sanción y despido de la Policía fue arbitrario y deja sin efecto la Resolución Suprema 117 por la cual me pasaron al retiro y ordena al Ministerio del Interior para que se me retribuya todos mis derechos e inclusive todo lo relacionado al cómputo de años de servicio, los efectos pensionarios y todo", dijo satisfecho.
Informó, asimismo, que Indicó que una notificación al respecto fue enviada el lunes al Ministro del Interior, al Director General, al Director de Recursos Humanos y al Procurador de la Policía Nacional, a fin de que se cumpla la sentencia que no es apelable.
Luis Eduardo Podestá
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