asistió a misa junto a sus
padres en su tierra natal
El presidente de Venezuela Hugo Chávez lloró y clamó a Dios: “Dame vida aunque sea llameante, vida dolorosa, no me importa”, y luego interrogó al mismo Dios si “todo” lo que ha “vivido no ha sido suficiente”, informa hoy la edición digital del diario ABC de Madrid.
Según el diario, Chávez asistió a una misa en la madrugada de ayer en la ciudad de Barinas, si tierra natal, tras regresar de Cuba donde se sometió a una segunda fase de radioterapia.
“El presidente venezolano Hugo Chávez no pudo contener las lágrimas esta madrugada durante en una misa de acción de gracias por su salud, celebrada en su tierra natal de Barinas, en la que pidió a Cristo que le conceda más tiempo de vida, no importa en qué condiciones, pero que no quería morir todavía”, informó ABC.
Las cámaras no captaron el llanto del mandatario pero él confesó que había llorado. Con voz entrecortada dijo: “No sé ni cómo decir lo que estoy sintiendo, pero lo voy a decir de alguna manera, no ha sido fácil lo que me ha tocado, no pude evitar unas lágrimas cuando sentí la mano amorosa de mi madre y al mismo tiempo la mano de mi padre”.
Imploró luego a Cristo: “Dame vida aunque sea llameante, vida dolorosa, no me importa, dame tu corona, Cristo. Dámela, que yo sangro. Dame tu cruz, cien cruces, que yo la llevo, pero dame vida. No me lleves todavía, dame tus espinas, dame tu sangre, que yo estoy dispuesto a llevarla pero con vida, Cristo, mi señor. Amén”.
Más adelante dijo que es vital hablar de la vida en todo momento, “por más difíciles que sean las circunstancias”, y agradeció por los actos religiosos que se han oficiado por su recuperación, indicó el diario.
Se informó, de otro lado, que prepararía una visita al Brasil, según anunció el miércoles la cancillería venezolana. Según el anuncio, el mandatario “tiene la intención de reunirse ‘próximamente’ en Brasil con la presidenta Dilma Rousseff y con el ex jefe de Gobierno José Ignacio Lula da Silva”.
ABC dijo asimismo, que el periodista brasileño Nelson Bocaranda, quien sigue minuciosamente la salud de Chávez, apunta, a propósito, que el presidente venezolano “estaría pensando en la posibilidad de seguir su tratamiento en Brasil”.
Luis Eduardo Podestá
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